Después de 20 años en un desván, creí conveniente lavarlo a 90ºC para desinfectarlo y evitar cualquier enfermedad chunga desconocida. También pensé que si lo lavaba a 90ºC mejor centrifugarlo bien para ahuyentar las bacterias restantes. 1400 revoluciones era una buena opción. O eso pensé hasta que lo saqué y me encontré al oso descuartizado.
1 minuto de silencio por su muerte.
jijijijiji
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